Soy una niña que estuve en un campo de concentración, sufriendo los continuos malos tratos que recibíamos a diario. Estoy muy feliz de haber salido de aquel infierno. Ahora se lo que es verdaderamente el sufrimiento. Mis padres fueron engañados obligándoles a entrar en un edificio que tenía una chimenea donde salía un gas extraño, que mas tarde descubrí que era el holocausto
Verónica Fernández García 3º ESO
No hay comentarios:
Publicar un comentario